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miércoles, 20 de junio de 2012

ANIMACIÓN LECTORA



                Hace unos cuantos siglos hubo una auténtica revolución en la sociedad debida al invento del alemán Johannes Gutenberg. Este invento fue la imprenta de tipos móviles. Hasta la aparición de la misma los libros eran difundidos mediante copias a mano, generalmente hechas por clérigos, que hacían las réplicas por encargo de otros clérigos o de la alta nobleza. Después del invento de Gutenberg  los libros empezaron a hacerse con más público como objetivo debido a la posibilidad de hacer muchos libros en poco tiempo. Esto llevó a la culturización del pueblo.
Con el paso de los años, las imprentas fueron evolucionando, y los autores escribían libros dirigido a diferentes tipos de público, hasta llegar (como hemos visto en bloques anteriores) a la literatura infantil.
En la actualidad vivimos en el mundo de la información: estamos rodeados de un exceso de la misma, con luces, sonidos y colorines que intentan llamarnos la atención de todas las formas posibles. Y lo consiguen. Y sobretodo provoca una sobrecarga en los niños, lo que ha provocado lo que muchos llaman “TDA” o “TDAH”, por el que se medica con drogas potentes a niños con un “transtorno” provocado por los mismos que les medican…pero ese es otro tema. El caso que nos ocupa… ¿cómo es posible que los niños capten la atención en unos papelitos blancos encuadernados en los que hay dibujadas unas aburridas y pequeñas letras negras estando rodeados de tantas luces de colores? ¿Para qué hacerlo?
Aclaro y respondo, primero, la última pregunta: habiendo evolucionado tanto las tecnologías de la información podemos utilizar los modernos E-books, por ejemplo, pierde lógica utilizar los “anticuados” libros en formato papel, ya que siempre tendemos a utilizar lo moderno. En mi opinión los extremos nunca son buenos… Ni utilizar únicamente estos avanzados aparatos de lectura, ni excluirlos por la nostalgia de los libros de toda la vida. Creo que para el aula y la animación a la lectura a los alumnos lo mejor sería la conjunción de ambas, ya que los E-books son muy atractivos y llaman la atención a los niños (y a los adultos) y los libros tradicionales son más baratos y sencillos de manejar. Los niños, juegan, corren, saltan, se mueven, y rompen cosas: va intrínseco en ellos y generalmente los aparatos electrónicos son más fáciles de romper, además de ser más caros.
Y ahora respondo a la primera pregunta exponiendo una serie de animaciones a la lectura que se me ocurren en mi hipotética futura clase, en la que la lectura (como en mi vida) es muy importante, y se leerían varios libros de diferentes temas a lo largo del curso. Esta hipotética clase estaría en un colegio de recursos medios, tendremos libros de formato papel para todos los alumnos y tres E-books. Procedería para animar a la lectura de la siguiente forma.
-ANTES DE LEER
·         A principio de curso haría una exposición en Power Point de todos los libros que se podrían leer: una explicación de cada uno, con un resumen, los temas, y las partes atractivas que tuvieran. Tras la explicación, haría una votación en la clase para que los propios alumnos eligieran los 9 libros que leerán a lo largo de los 3 trimestres.
·         Habría una exposición más detallada antes de la lectura de cada libro.
·         Cuando se presente el primer libro se sorteará entre todos los alumnos los tres E-books, y los demás recibirán libros tradicionales. En los demás libros los alumnos que superen mejor unos criterios que expondré más tarde serán los que reciban los libros electrónicos.
·         Antes de empezar la lectura, se hará una serie de preguntas abiertas para prepararla.
-DURANTE LA LECTURA
·         Habría una lectura conjunta en clase, con uno de los alumnos dirigiendo quién va leyendo, cambiando al lector de forma dinámica. Además los alumnos podrían ir avanzando la lectura en su casa, aunque en clase la seguirán de igual manera.
·         El profesor iría evaluando la lectura de los niños con dos criterios: cómo empezaron a leer y como fueron evolucionando.
·         Cada un número concreto de capítulos, que variará según el tamaño del libro, se hará una exposición libre sobre lo leído y un debate.
·         Cuando se haya superado la mitad del libro, se harán otra serie de preguntas sobre cómo creen los alumnos que terminará la historia.
-TRAS LA LECTURA
·         Se harían a los alumnos dos pruebas, una objetiva (de la propia historia) y otra subjetiva (su opinión sobre el libro y lo que han aprendido).
Como he dicho antes, tras la lectura del primer libro (en el que se sortearán los E-books) se repartirán los tres que hay al principio de cada nuevo libro a 3 alumnos, cada uno de los cuales será (sobre la lectura anterior):
·         El que mejor haya leído, o el que más haya evolucionado en su lectura oral.
·         El que mejor haya realizado la exposición.
·         El que mejor haya superado la prueba objetiva, o bien si se ve en la prueba subjetiva algún alumno poco motivado, para motivar a este alumno.
Por último los alumnos, divididos en grupos, realizarán al finalizar el curso una representación teatral ante toda la clase.

Junto a todos los libros "dados en clase" se recomendará a los alumnos unos libros que les puedan ser atractivos, conociendo los gustos de cada uno (lo que para mí es una de las cosas básicas que debe conocer un buen profesor).

1 comentario:

  1. En realidad no se trataba de que tú hicieras tu propia propuesta de actividades antes, durante y después (eso es el objetivo de la actividad, no del tema), sino que buscaras información en diferentes fuentes sobre cómo mediar en el proceso lector de un libro.

    Tu entrada tiene cuestiones muy buenas que estarían mejor en la reflexión personal. Pero hay algo que me preocupa enormemente: ¿después de toda la asignatura de literatura realmente crees que se debe hacer una prueba objetiva al terminar de leer un libro?

    Me gustaría que leyeras lo que aportan tus compañeros, al menos los que tienen buena nota en este bloque y verás como todos han entendido que la lectura puede ser denotativa, pero no objetiva y que las pruebas de este tipo solo valoran la memoria, pero no la comprensión.

    Replantéate este punto antes de que te conviertas en el típico maestro que hace que los niños odien leer.

    Lo de la lectura en voz alta hecha por los chicos "de forma dinámica" también es discutible, porque la lectura comprensiva es la silenciosa; la lectura en voz alta es una mera lectura expresiva que, si bien es importante practicarla, conduce a que los demás comprendan más a que comprender uno mismo. Se pierde mucho esfuerzo cognitivo y mucha atención en "leer correctamente" y todo este esfuerzo se resta al placer de entender, de sentir y de disfrutar.

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